Puente Baluarte, obra emblemática del sexenio. Foto
Archivo Reuters
La obra civil de la carretera Mazatlán-Durango (uno de los íconos de la actual administración) estará terminada este año, pero tendrá condiciones operativas hasta el primer trimestre del próximo, dijo el secretario de Comunicaciones y Transportes, Dionisio Pérez Jácome.
“Nos faltan algunas estructuras, por ejemplo, un puente que se debe cerrar y algunos túneles. En unos terrenos tuvimos algunos litigios por los derechos de vía, pero estamos avanzando a todo lo que da”, declaró luego de entregar premios a empresas constructoras.
La carretera, que incluye el mayor puente colgante del mundo, el Baluarte, ha representado una inversión superior a los 20,000 millones de pesos y permitirá conectar en menos de tres horas los estados de Durango y Sinaloa.
Originalmente, se planeó que los 230 kilómetros de longitud se inauguraran antes de concluir el sexenio del presidente Felipe Calderón; sin embargo, con base en los últimos reportes, hay 110 km en operación en la parte de Durango y 20 en Sinaloa.
El Secretario de Comunicaciones indicó que, a pesar de que al cierre del 2012 faltará instalar los equipamientos electrónicos y eléctricos de la carretera referida, se lograron avances relevantes en el tema carretero.
“La meta más ambiciosa fue construir 17,000 km y vamos a cerrar en más de 21,000 km. Lo que se ha hecho no tiene precedentes y se logró gracias a las inversiones privadas, como proyectos de prestación de servicios y concesiones, entre otros”, refirió Pérez Jácome.
Relevo sexenal
El funcionario federal aseguró que durante las últimas semanas han mantenido estrecha comunicación con el equipo de transición del presidente electo, Enrique Peña Nieto.
“Vamos avanzando bien. Han sido reuniones muy positivas. Hemos podido hacer un planteamiento de lo que se ha hecho en nuestra gestión para que se dé continuidad. También entregamos prospectivas de algunos proyectos que están integrados en el Programa Nacional de Infraestructura, que por ahora se enfocó a fortalecer los ejes carreteros”, agregó.
Aún con los pendientes acumulados en infraestructura, como la construcción de un aeropuerto alterno al de la ciudad de México, el de la Riviera Maya, el desarrollo portuario de Punta Colonet o algunas presas hidráulicas, el titular del sector aseguró que finalmente será la próxima administración federal la que decida cuáles son sus prioridades.
Y para ello será útil la cartera de proyectos de infraestructura que presentará la Conferencia Nacional de Gobernadores en las próximas semanas.
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