Trucos caseros para eliminar el moho

Editorial Metroscubicos.com / Santiago Guzmán Montaño

Contra el moho el principal reto no es quitarlo, sino eliminarlo. Limpiar el moho se puede lograr rápidamente, pero si las esporas están en el ambiente este puede instalarse y comenzar a crecer de nuevo en cualquier momento, causando una propagación instantánea. Muchos productos comerciales que pretenden eliminar el moho no son eficaces, simplemente porque no atacan las esporas.

Mantener los espacios secos y libres de humedad suele ser suficiente para evitar el moho. Abrir puertas y ventanas para la ventilación regularmente es algo recomendable, en climas húmedos se recomienda el uso de un deshumidificador.

El moho ataca cualquier casa sin avisar, sobre todo cuando hay humedad en el ambiente, estropeando las paredes y muebles con facilidad. Por eso hay que estar atentos a los síntomas que nos puedan estar avisando de la aparición del moho.

Uno de los primeros síntomas de la presencia de moho en el hogar es el mal olor o marcas de agua en paredes, techos y mobiliario.

Los sitios donde debemos prestar más atención son la cocina, el baño, en las paredes, cerca de las tuberías. Estas son las zonas de la casa que tienes que tener más presente al momento de controlar el moho.

Si el moho se comienza a desarrollar, se puede morir con el uso de vinagre o jugo de limón, o una solución de aceite del árbol de té o extracto de semilla de pomelo con agua. Como es poco el líquido que se necesita para evitar la humedad, frota con un paño humedecido con el líquido y borra el moho, es una gran manera de limpiarlo.

A el moho tampoco le gustan las temperaturas altas, por lo que una vez que lo hayas eliminado, el calor debe aumentarse en la habitación y permanecer cerrada para que las esporas no se propaguen hacia otras partes de la casa.


Otra forma de eliminar el moho es poniendo a hervir una taza de vinagre a fuego alto para matar a las esporas. Los mohos en las paredes, pisos y otros inmuebles pueden ser abordados con la técnica de secado, mientras que los muebles con moho pueden ser limpiados por fuera.

El moho nunca debe ser cubierto, ya que alegremente se repiten y proliferan detrás de la cubierta, con el tiempo la creación de una mancha de moho puede ser un peligro para la salud. En caso que paredes y pisos tengan un moho severo, puede ser necesario que se instale nuevo material.

Las manchas dejadas por el moho pueden ser difíciles de eliminar. La eliminación con productos comerciales suele ser eficaz, pero deben ser probados en un área oculta para asegurarse de que no crean manchas en sí mismos. En caso de que existan manchas difíciles en las paredes ya pintadas, si pasan varios meses sin recurrencia, la mancha puede ser preparada y pintada. Para los propietarios que no están interesados en eliminar el moho por su cuenta, existen muchas empresas que se especializan en la limpieza de moho y hongos. Estas empresas pueden limpiar el moho y ofrecen consejos para prevenir su aparición.

Más vale prevenir
 

¿Pero no sería mejor evitarlo antes de que se genere? Por ello te sugerimos seguir alguna de estas recomendaciones:

1.- Es muy útil instalar ventiladores en la salida del baño y cocina, de esa forma la humedad por el vapor de agua o las comidas no queda en el ambiente.

2.- Evita tener alfombras en áreas húmedas como el baño, porque no hacen más que hacer perdurar la humedad y ser un foco para dar lugar al moho.
3.- Ten cuidado de que no quede agua acumulada debajo de las plantas dentro de la casa.

4.- De vez en cuando limpia los baños con lejía y otros productos que eliminen el moho.

5.- Si estás pensando en pintar la casa, cuando lo hagas no olvides de agregar productos contra el moho.

6.- Si no es posible ventilar las habitaciones de manera natural y deben permanecer cerradas por mucho tiempo, te recomendamos utilizar en estos lugares un humidificador al menos una vez a la semana para evitar la aparción de esporas.

7.- En los clósets, puedes instalar y dejar encendido un pequeño foco de bajo voltaje, esto permitirá mantener una buena cantidad de calor suficiente para evitar la humedad y la aparición de moho. También puedes recurrir a instalar en el interior algún producto antihumedad como el carbón activado.

8.- Contra el mal olor del moho en clósets, roperos y cajones, puedes comprar piedras de filtro de carbón, como las que se usan en peceras caseras. Colócalo en bolsas de plástico hasta que el olor se haya ido.

9.- Si ya hay señales de moho en alguna estancia de tu casa, para eliminarlo puedes recurrir a cualquiera de las siguientes mezclas, todas son efectivas:

• Alcohol: mezcla mitad y mitad con agua.
• Agua oxigenada: de 2 a 4 cucharadas por galón de agua.
• Fosfato trisódico: de 4 a 6 cucharadas por galón de agua.
• Blanqueador de cloro: utiliza de 1/2 a 1 taza por galón de agua.

Es importante probar estas mezclas primero en un lugar poco visible, ya que pudieran manchar  algunas superficies.

10.- Moho en los libros. Aspira o sacude el moho suelto. Rociar las páginas con almidón de maíz o talco si los libros están húmedos y dejarlo por varias horas, luego cepillar. Coloca una caja de gel de sílice o carbón activado en algún lugar del librero para evitar que regrese el hongo.

11.- Muebles con señales de moho. Limpia con cuidado el mobiliario para evitar que las esporas vuelen y se esparzan. En el caso de un mueble de madera, puedes mezclar agua con un poco de jabón para trastes, aplicar en poca cantidad (el agua no es buena para la madera) y tallar suavemente. Si el moho permanece, te recomendamos frotar con alcohol (haciendo primero la prueba en un lugar oculto para evitar que se dañe el acabado) luego lava y seca.

12.- Moho en el plástico. En el caso de la cortina del baño, talla con un cepillo y agua con detergente; también puedes eliminarlo limpiando con una solución de agua y alcohol al 50%. Para prevenir te recomendamos estirar la cortina en la barra después de bañarse, procura que no quede enredada y sacude al menos una vez a la semana.

13.- Moho en mobiliario con tapiz. Aspira el tapiz de los muebles, los tapetes o los colchones. Luego limpia con una esponja que contenga un poco de jabón. Debes probar primero en un lugar escondido para asegurarte que no habrá decoloración ni daño. Limpia con una toalla húmeda, seca con secadora de cabello o ventilador y adiós al moho.

14.- Moho en el jardín. Si observas que existen manchas blancas, peludas o puntos negros en lugares del jardín como los ladrillos, entablados, techos de tejas, estuco o en el piso, mezcla 1/2 taza de blanqueador líquido en un galón de agua. Antes de aplicar esta mezcla, se recomienda utilizar una máscara o anteojos protectores. Con esta preparación humedece la superficie invadida por el moho y cepilla, déjala actuar de 5 a 15 minutos y enjuaga a fondo, especialmente si son ventanas con marcos de aluminio. No utilizar esta mezcla en madera virgen. Si el problema persiste, es probable que necesites un fungicida comercial; siga las instrucciones del fabricante.
15.- También es conveniente inspeccionar las mangueras, tuberías y conexiones de agua, tanto de la casa, como de electrodomésticos. Es frecuente que el lavarropas tenga pérdidas de agua que pueden incitar al moho. Por último también conviene revisar esporádicamente las canaletas de agua y el techo, para que no haya filtraciones de agua que generen humedad.