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29 de Abril del 2013 | Editorial Metroscubicos
¿Cuántas veces has pensado, en un lugar interior, que el espacio continúa y resulta que sólo es el efecto que ofrece un espejo? ¡Yo he llegado a pensar que hay otra persona enfrente de mí y resulta que es mi propio reflejo! Y después de percatarme me da gusto que quien decidió colocar un espejo ahí logró su objetivo: generar un completo efecto de amplitud.
En espacios reducidos, una de las soluciones más audaces para lograr un efecto de amplitud es colocar un gran espejo de piso a techo en un muro, lo cual provocará la repetición del espacio donde es colocado. Pero recuerda que para que este efecto la pueda leer el ojo humano se necesita una referencia de donde parte el espejo, como puede ser una esquina o algo que lo delimite para que sea repetido.
Si solo colocas un espejo en medio de un muro al mismo paño de este, podrás generar reflejo pero no profundidad, ya que no estás partiendo de una referencia que lo delimite.
Este mismo resultado se puede lograr colocando un espejo encontrado con una ventana, pero en este caso generarás una doble entrada de luz natural. Una de las características y beneficios del espejo es que no solo refleja las imágenes, sino que también duplica la luminosidad de los elementos que lo rodean.
Sin duda, colocar un espejo justo en la esquina de una ventana o de una gran fuente de iluminación es una excelente solución para bañar de luz un lugar.
La idea de ganar amplitud a partir de un truco o efecto siempre es atractiva, pero no te encierres en la idea de que debes generar un espacio gigante reflejado, que parezca otra habitación. Los efectos de amplitud se pueden lograr de muchas maneras, desde lo que pareciera una ventana que no lo es, hasta tal vez un efecto de más altura al colocar un espejo en el plafón de un vestíbulo.
Duplicar un espacio es el punto de partida para generar una sensación de amplitud.
Así pues, hay que adaptarse al espacio y a lo que éste pida. Cada sitio es único y tiene un sin número de soluciones diferentes. No peques de ambicioso e intentes lograr que la habitación completa se duplique, se verá forzado y falso.
Mejor concentra tu creatividad en los detalles; por ejemplo, puedes lograr que un librero se vea más profundo y con el doble de libros si llenas de espejo el fondo.
También, al colocar un espejo dentro de un nicho puede parecer que el nicho es más profundo. O que en el final de un pasillo en la esquina generes un pequeño detalle como remate y así hagas creer que hay un vano o un nicho que da hacia otro lugar, esto provocará que inconscientemente el que lo vea crea que tienes otra habitación detrás de ese muro, así con un detalle generas amplitud psicológica en tu casa.
Piensa que los espejos son como una ventana, si partes de ese principio diséñalo de esa manera, con todo y sus marcos, como si fuera una ventana abatible, lleva esta idea o "engaño" hasta sus últimas consecuencias, puedes hacer una ventana cuadriculada que en lugar de tener cristales claros con total transparencia tenga espejos, y coloca la misma jaladera que llevaría una ventana, si logras que este elemento tenga el mismo lenguaje de las demás de la casa tendrás la misma sensación que te dan las reales, y si las colocas contiguas ganaras más luminosidad.
Nuestro consejo
Si tienes necesidad de mandar hacer un espejo a la medida para lograr efectos en el interior de tu casa o departamento, puedes comprar espejos prefabricados con medidas estándar y colocarlos con el mismo propósito, el resultado será el mismo pero costará mucho menos dinero y esfuerzo.
Si decides hacer un ejercicio más minucioso y específico mandando hacer un espejo a la medida, cualquier local comercial de "vidrio y aluminio" puede hacer estos trabajos a precios razonables, los espejos no son un material costoso; recuerda pedir que los bordes sean pulidos ya que puedes lastimarte al manejarlos y colocarlos.
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