Friday, October 14, 2011

Tu primer hogar, cómo rentar de la mejor manera

Tu primer hogar, cómo rentar de la mejor manera

Editorial Metroscubicos.com / Gustavo Guzmán
13 de Octubre de 2011
Una vez que decidimos dejar la casa paterna para emprender una vida independiente, nos enfrentamos a la necesidad de encontrar dónde vivir. En muchos casos, la primera opción es rentar una vivienda e iniciar así la formación de nuestro nuevo hogar y empezar a planear lo que en un futuro formará parte del patrimonio familiar.

Rentar un inmueble es la mejor opción para quien no cuenta por el momento con dinero suficiente para pagar un enganche para la compra de una vivienda. Esta opción también permite empezar a evaluar las zonas para considerar si, en un mediano plazo, se representa una buena opción para adquirir una casa propia.

Sin embargo, si hemos decidido que el siguiente paso en nuestra vida es rentar un inmueble, debemos tener en cuenta algunos aspectos:

1.- Casa o departamento. Esta decisión depende principalmente de la capacidad de pago, ya que una casa suele representar una renta mayor. Al comienzo, quizá la mejor idea sea un departamento, para que deje un margen que se destine al ahorro y poder adquirir una propiedad en el futuro.

2.- Ubicación. Conviene recorrer los lugares que nos interesan para vivir y así conocer el ambiente donde están las propiedades en renta que nos interesan. De la misma manera, es importante que cuando nos llame la atención un anuncio, en Internet o algún medio impreso, acudamos a revisar la zona, ya que en ocasiones no se menciona cómo son los alrededores y probablemente al llegar al lugar no sea lo que estemos buscando.

Ahora bien, si vamos a hacer el esfuerzo de pagar una renta, lo conveniente es que esté lo más cerca posible de nuestro centro de trabajo, de esa manera ahorraremos un poco en gastos de transporte y estaremos más desahogados para el pago de la renta.

3.- El tamaño. Otro importante aspecto a considerar son los metros cuadrados disponibles, así como el número de habitaciones que tiene la propiedad. Para los recién casados, una recámara parece ser suficiente; sin embargo, es conveniente considerar la opción de que tenga mínimo dos habitaciones, para destinar la otra como estudio, cuarto de televisión, para visitas o para la llegada de un nuevo miembro a la familia.

Podemos tener una idea aproximada de qué tan grande o qué tan chico debe ser el espacio que se necesita para iniciar la nueva vida. Pero también depende también de si deseas adaptar algún área para su uso personal o si el lugar ofrece ventajas extras como terraza, cuarto de lavado, balcón, etc.

4.- El depósito. De manera general, ya sea un particular o por medio de una empresa inmobiliaria, nos pedirán que realicemos un depósito para garantizar nuestro compromiso y que servirá también como fondo en caso de que la propiedad sufriera daños que hubiera qué reparar a causa de nuestra estancia. Conviene revisar, antes de firmar, cuáles son las condiciones específicas para la renta de dicho inmueble.

Antes de mudarte a otro hogar, debes verificar que el inmueble esté en óptimas condiciones, muy limpio y que no haya sufrido daños importantes. De esa manera podrás recuperar el dinero que depositaste en un principio.

5.- La renta de cada mes debe cubrirse dentro del plazo que se haya establecido en el contrato. Pagar puntualmente nos da una buena imagen y permite que tengamos una relación sana con el arrendador.

Particular o con inmobiliaria

Cuando acudas a conocer alguna casa o departamento que te interese encontrarás dos opciones: que sea un particular quien ofrezca hacer el trato o que sea una empresa inmobiliaria. Ambas opciones son buenas, lo importante es proteger nuestros intereses, asegurándonos de hacer todos los trámites de manera formal.

Tanto con un particular como con una inmobiliaria, al decidir rentar el inmueble, tendrás que establecer un contrato que especifique todos los aspectos a considerar en cuanto a los pagos, fechas, plazas, condiciones actuales de la vivienda, servicios y otros. Es importante verificar que todas las cláusulas nos parecen adecuadas y justas. Recuerda no quedarte con dudas.

Normalmente los contratos se firman por mínimo un año, es decir, que antes de ese tiempo no podemos abandonar la propiedad ni el dueño podrá requerírnosla. Es importante considerar esto, ya que si deseamos cambiar de casa, antes de cumplir el año, probablemente tengamos que cubrir alguna cuota de penalización.

Te recomendamos que para cualquier trámite de este tipo te asesores con un abogado o especialista en estos trámites, así podrás vigilar que todo esté en orden y tendrás el respaldo para cualquier aclaración. También, si rentarás a través una inmobiliaria, puedes buscar más información sobre ésta, por ejemplo con la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (www.ampi.org).

Responsabilidad

Debido a que el inmueble no es nuestro, nos encontramos ante una responsabilidad, es decir, que tenemos el compromiso de entregar la vivienda tal y como la recibimos, y, salvo el desgaste normal, nuestra responsabilidad es resarcir los daños graves que hayamos causado.

Considera que existe una gran variedad de seguros, como en todo, es importante comparar y elegir el que se adapte a nuestras necesidades. Para mayor información sobre seguros, te recomendamos consultar la página de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (www.amis.org.mx))

Las recomendaciones aquí mencionadas son una ayuda para encontrar la vivienda que buscas, pero no olvides acercarte a expertos. Asesorándote lograrás tener las herramientas necesarias para encontrar el lugar que más te conviene y por consecuencia, disfrutar más de él.

No comments:

Post a Comment