Ideas para ambientar la recámara matrimonial

Editorial Metroscubicos.com / César Iván Martínez

Al momento de decorar nuestro hogar es común enfocarnos en ambientes comunes como la sala, el comedor, la cocina o el cuarto de los niños, y en muchas ocasiones descuidamos un espacio tan importante como la recámara matrimonial, donde es importante prestar atención por ser un sitio especial para la tranquilidad y funcionamiento de toda la casa. La principal importancia de la recámara matrimonial es que se trata de un espacio donde dos personas comparten el lecho y cada uno de los detalles en la habitación. Es un ambiente donde es necesario considerar una buena elección del mobiliario y los elementos decorativos. La recámara matrimonial es un espacio donde los géneros masculino y femenino deben convivir, donde ninguno debe tener predominio sobre el estilo y diseño para que se acomode perfectamente a cada uno de ellos, pero que a la vez se conjugue bien con la pareja y sus preferencias. Es verdad que las opciones para decorar una recámara matrimonial son muy amplias y es una de las situaciones donde se pone a prueba la unidad de pareja a la hora de escoger todos los detalles. Sin embargo, más allá de los tonos, colores y otros detalles de este tipo, la recámara matrimonial debe resultar funcional para cada uno de ellos y tener las mismas ventajas para los hábitos de ambos.     Proyecto de dos Acondicionar un cuarto de matrimonio debe ser un proyecto de dos, nada más apropiado. Comiencen por intentar descubrir el tipo de cuarto que quieren: minimalista, romántico, contemporáneo o clásico. Encuentren la respuesta para cada pregunta visitando distintas tiendas de muebles y decoración. En el mercado existen variadas propuestas donde podrás ver de cerca recámaras modelo con todos los accesorios necesarios. No olvides que están proyectando un oasis personal, por eso hagan todo con calma y consideren siempre más de una opción, sin olvidar las revistas y los sitios dedicados al arte de decorar. Las habitaciones personalizadas son las más cómodas y habitables. Puedes optar por colgar cuadros que combinen con el edredón o con la alfombra. Puedes ampliar sensorialmente el tamaño del dormitorio colocando espejos estratégicamente. Hacer el espacio más sobrio o romántico escogiendo una flor o una planta para decorar. También puedes colocar marcos con las fotografías de tus seres queridos y lámparas sobre las mesitas. Desde luego que cuando se trata de compartir una habitación lo ideal es que el proyecto decorativo se construya entre dos, sobre todo porque siempre van existir preferencias individuales.     Elementos básicos Elegir el mobiliario, porque además de la cama hay que contemplar los muebles destinados al almacenaje: la cómoda, armarios y también las mesas de luz. Todo dependerá de las dimensiones del cuarto y de la optimización del espacio que logres. O sea, un cuarto estrecho puede no tener espacio para una cómoda de grandes proporciones, pero pueden encajar a la perfección dos cajoneras altas y angostas. A esta altura es necesario tomar muchas medidas, hacer dibujos en un papel y hasta hacer simulaciones en el mismo cuarto, y cuidado no pierdas de vista que una habitación demasiado llena cansa la vista y perjudica el descanso, aprovecha los espacios de manera que no se ahogue la libertad de movimiento. Inviertan en un buen colchón, la calidad de su descanso va a depender de él. La cama es la principal protagonista, así que no escatimen en gastos. El modelo seleccionado debe armonizar con el resto de la decoración del dormitorio y tampoco desentonar con la decoración general de la casa. Pueden colocar algunos asientos en la habitación. De esta forma no se utilizará la cama como sofá. Si hay espacio suficiente pueden colocar un sillón de dos plazas para leer o para ver televisión. Esto permitirá mantener la cama limpia y en orden. Ver televisión durante la noche puede ser agradable. De todas formas, y para no hacerlo por inercia, se puede colocar la televisión en un armario. De esa forma se podrá ocultar cuando uno lo desee y prestarle más atención a nuestra pareja. Hay que limitar los adornos. Decorar las paredes con fotografías familiares puede ser una buena idea. Sin embargo, hay que evitar el exceso de adornos de porcelana, los osos de peluche y otros pequeños objetos de cristal. Así se mantendrá la habitación despejada y prolija. Ambas partes de la pareja deben tener acceso a algún lugar para guardar sus objetos personales. Lo ideal es colocar dos mesitas de noche; una por cada lado de la cama. De no ser posible hay cabeceras que cuentan con espacio para colocar objetos. Para el resto del mobiliario todo dependerá de gustos, presupuestos y dimensiones del cuarto. Si no se dispone de mucho espacio, pueden no tener lugar para una cómoda de grandes proporciones, pero si para cajoneras altas y angostas. Siempre habrá una alternativa adaptada a sus necesidades.     Darle gusto a los sentidos Respecto de la elección de los colores tanto para las paredes (no más de tres) que deben combinar a la perfección con los muebles, como para los detalles que van a imprimir pequeños toques coloridos (alfombras, tapetes, accesorios). Lo ideal es optar por una paleta neutra, de fácil combinación con otros tonos en caso de que dentro de algún tiempo quieran darle un aire fresco a su habitación. Algunas sugerencias incluyen: los dorados para un toque clásico, los plateados para un look futurista, el blanco para un ambiente clean y minimalista, el negro para un cuarto elegante y sofisticado, el azul para dar la sensación de frescura, o pueden jugarse por un color cálido, como el rojo y naranja. Si la idea es hacer que la habitación luzca mucho más grande, es recomendable utilizar colores claros tipo pastel, para que se vea mucho más iluminada y espaciosa. En fin explota tu creatividad, aquí el arco iris es el límite! Los textiles Son igualmente importantes y van a envolver todo el espacio, comenzando por la decoración de las ventanas para lograr la máxima privacidad. También tienen que decidir si van a cubrir o no el suelo. Pueden optar por dos alfombras a cada lado de la cama, agregar una tercera a los pies u optar por una única alfombra de grandes dimensiones sobre la que se va asentar la cama. No hay nada como acostarse en una cama con sábanas suaves y confortables, por eso pon especial atención en la ropa de cama. Además de los habituales juegos de algodón o franela, invierte en sábanas de seda para noches especialmente románticas. Un buen edredón es esencial y si es reversible puedes vestir la cama conforme a tu estado de ánimo. Completar el conjunto con almohadas confortables y una manta suave para los pies de la cama.     Qué recomienda el Feng Shui La cama.- Nunca coloques la cabecera de la cama al lado de la puerta del dormitorio, instálala diagonalmente, opuesta a la puerta y recargada sobre la pared, de esta forma la dirección del sueño se corresponde con las buenas direcciones y energías de cada quien. Asegúrate que la entrada de la habitación sea visible desde ella. El espejo.- Los espejos de los dormitorios que estén directamente frente a la cama son la causa principal de la energía negativa de los matrimonios. Cuanto más grande es el espejo, mayor es el daño. No se recomiendan en todas las paredes, ni en el techo, dado que reflejan ondas negativas. Lo mejor, según esta teoría, es sacarlos por completo del cuarto o de lo contrario colocarlos en un lugar en donde a la hora de levantarse no se vean reflejados. Flores naturales.- El Feng Shui descarta que haya flores naturales y plantas verdes dentro del dormitorio. Tanto las plantas como las flores pertenecen al elemento madera y ello implica energía yang, no recomendada en un dormitorio. A cambio elige motivos florales para la cortina, colchas o para el empapelado de alguna pared. Aun así, no utilices imágenes demasiado llamativas o grandes. Lo importante es que la composición de la habitación se comprometa a proporcionar a cada quien la comodidad y relajación necesarios para obtener un buen descanso, pero si además es armónico con nuestras ideas, que mejor.